Para muchos una pickup es un vehículo de trabajo pesado. Para otros es un estilo de vida. Muchos ven un vehículo de carga como algo de lunes a viernes por el día y otros como el único auto que necesitan para hacer cualquier gestión. Independientemente de la preferencia de autos de cada cual, todos esperan que una pickup sea un vehículo resistente. Entonces entra al juego Nissan con una pickup liviana: La Nissan Frontier.
Aunque la marca antes conocida como Datsun (ahora Datsun es una división de Nissan) lleva creando camionetas desde 1934, no es hasta 1997 que desarrollaron la primera generación de la ahora Frontier. Un modelo similar conocida en otros mercados como Navarra cumple la misma función que la Frontier para la marca Nissan pero aunque en un principio estaban directamente relacionadas, a partir de los modelos 2022, la Frontier se mantendrá como un modelo exclusivo para el mercado estadounidense y Puerto Rico.
El pasado viernes comenzamos nuestra prueba de manejo de la Nissan Frontier. Haber tenido la experiencia de conducirla brevemente durante el lanzamiento el mes pasado, hizo que la experiencia fuera familiar al comenzar esta prueba de fin de semana. Desde que comencé a conducir, siempre sentí atracción por los autos viejos porque se sentían fuertes. Tuve varios autos de construcción “body-on-frame” (autos de carrocería sobre chasis) y los prefería sobre los “unibody” o monocascos (autos construidos en una sola pieza). La razón es que los autos de body-on-frame son de construcción más fuertes y resisten más el abuso de nuestras carreteras.
El “ground clearance” de esta pickup te permitirá subir cualquier terreno sin preocuparte de golpear la parte de abajo. De todos modos, si lo haces, las versiones Pro-X tienen protección para los componentes importantes como motor, transmisión y tanque de gasolina.
Al conducir la Nissan Frontier Crew Cab Pro-4X durante el fin de semana sentía que estaba en uno de esos autos fuertes de antes pero con las comodidades esperadas de un auto moderno. La suspensión de la nueva Frontier en la versión Pro-X (tracción 4×2) y Pro-4X (tracción 4×4) está diseñada para trato extremo en carreteras no pavimentadas. Planificamos una prueba “off road” a la que no pudimos llegar por lo que tuvimos que hacer la prueba en un lugar más limitado al día siguiente. Aún en este lugar, conquistamos lugares en donde no cualquier vehículo 4×4 puede dominar. La suspensión Bilstein de estos modelos Pro es algo que requerirá ser honrada en un terreno inhóspito para la muchos 4×4. Esperamos coordinar el lugar indicado y una breve prueba en un futuro no muy lejano.
Los detalles de potencia y conducción fueron tan bien pensados como los detalles en su interior. La rudeza se ve en los contornos de la carrocería, en el sonido del motor, en las ruedas y neumáticos, en la tapicería y hasta en las múltiples agarraderas disponibles para que los conductores no sientan que saldrán del vehículo en condiciones extremas de conducción.
Podría decir que el sistema de navegación fue lo único que me decepcionó pero no debo culpar a Nissan sino a los satélites disponibles en Puerto Rico. Estoy seguro que este sistema funciona mejor en Estados Unidos, después de todo este modelo de Nissan es construido en el estado de Misisipi, lo cual evidencia que el sistema de navegación no es algo poco probado. La alternativa hubiese sido conectar el iPhone al Apple CarPlay pero no teníamos el cable. En este caso la culpa fue de Nissan, ya que la Frontier tiene un cargador inalámbrico en la consola. No cogimos el cable porque no lo necesitábamos y luego buscamos en Google que el Apple CarPlay no está disponible a modo inalámbrico.
Fuera de ese detalle, llegar a la Frontier con las llaves en el bolsillo, abrir (o cerrarla) con un botón en la manija de la puerta, encenderla con un botón y adquirir toda la tecnología del Nissan Safety Shield 360 fue suficiente para provocar una excelente primera impresión en este vehículo que solo debía ser algo rudo. Al conducir un vehículo de 210.2” de largo puedes tener alguna dificultad para estacionarte en reversa o paralelo. En el caso de la Frontier, cuentas con 4 cámaras alrededor del auto que te facilitarán el estacionamiento como si estuvieras conduciendo un auto pequeño.
Su interior es muy silencioso y nos percatamos de esto al pasar por un establecimiento que tenían bocinas grandes con música alta pero no se escuchaba casi nada dentro de la cabina. Al bajar el cristal, pudimos notar del ruido que nos rodeaba pero que quedaba casi completamente aislado. El potente motor V6 de 3.8 litros y 310 caballos de fuerza solo se siente en el pedal pero muy poco se siente dentro de la cabina con los cristales cerrados.
Por otro lado, el rendimiento de combustible de 17 millas por galón (MPG) en ciudad, 22 MPG en autopistas y 19 MPG combinado, puede mejorar, quizás si le configuraran una opción “economy” para el uso diario. Después de todo, no siempre necesitamos esa rudeza.
Aparte de una opción de manejo más simple (algo que quizás el consumidor de este vehículo no le preste interés), si tuviéramos que solicitarle a la marca Nissan unas mejoras serían: 1. el sistema de conexión inalámbrica para el Apple CarPlay, 2. una opción automática para subir o bajar el cristal delantero derecho sin tener que sostener el botón y 3. el maravilloso sistema ProPILOT Assist de Nissan que convertiría esta pickup en un auto lujoso con caja. 
