Este Lincoln de 1939 conocido como el Sunshine Special fue el primer auto modificado para un presidente, el cual utilizó Frankin D. Roosevelt.
Cuando hablamos del auto conocido como La Bestia, es de amplio conocimiento que nos referimos a la limusina oficial del Presidente de los Estados Unidos. Conocido también como “Cadillac One”, “Limousine One”, “First Car” o ”Stagecoach”, este vehículo en uso desde el 2009 fue preparado a un costo de 1.5 millones de dólares con un diseño similar al Cadillac CTS, compartiendo sólo algunos detalles estéticos con el auto de producción. Como si fuera poco, hay dos idénticos y en ocasiones utilizan los dos para crear distracción.
El primer presidente de los Estados Unidos que utilizó un auto modificado para su uso oficial fue Franklin D. Roosevelt, el cual utilizó un Lincoln de 1939 bautizado como el Sunshine Special. Para esa época el auto era usado a distancias cercanas a la capital federal y las modificaciones eran mínimas. Hoy día el auto puede transportarse por avión a donde quiera que vaya el Presidente. El viaje más reciente de La Bestia fue cuando el Presidente visitó Cuba y la limusina presidencial lo esperaba en el Aeropuerto Internacional José Martí en la Habana. Sin embargo el presidente puede ir en cualquier auto oficial tanto en o fuera de Estados Unidos siempre que sea construido en Estados Unidos y modificado para uso gubernamental.
La Bestia está construida con un diseño similar al Cadillac CTS pero solo comparte la parte estética.
Este auto sobrepasa lo que se supone sea un auto blindado. Con un peso de unas 8 toneladas es más bien un tanque de guerra preparado para ser conducido a una velocidad máxima de 60 MPH tanto en carreteras normales o en cualquier otro terreno, pero con todos los lujos posibles para complacer al primer mandatario estadounidense. La bestia del presidente Barack Obama fue construida para sustituir la que heredó del presidente George W. Bush y a su vez será sustituida por la que General Motors está preparando para el nuevo presidente electo Donald Trump, la cual deberá estar lista para el día de la toma de posesión el 20 de enero.
Las puertas de La Bestia son de 8 pulgadas de grosor y no tienen cerraduras externas. Sólo el Servicio Secreto sabe como abrirlas.
Sabemos que por ser un vehículo de estado tiene muchos detalles que desconocemos como la manera de abrir sus puertas por ejemplo ya que este auto no tiene como introducir llaves en sus puertas. Entre los detalles que sí se han hecho públicos es precisamente el asunto de las puertas, las cuales son de 8 pulgadas de grosor, pesan lo mismo que una puerta de un avión Boeing 747, sellan la cabina de la misma manera que la de un avión para proteger al Presidente de ataques bioquímicos y por supuesto son a prueba de balas.
William Howard Taft fue el primer presidente en tener un autos de motor en la Casa Blanca dejando atrás las carretas tiradas por caballos.
Otros detalles de La Bestia son: tanque de gasolina preparado para contraer explosiones en caso de un ataque directo, tanque de oxígeno, botellas con una reserva de la sangre del Presidente en caso de una transfusión, neumáticos reforzados y con una segunda goma adentro por si estas son perforadas, chasis reforzado, cámaras para ver de noche, comunicación satelital, línea directa con el Vicepresidente y el Pentágono, paneles protegidos con aluminio, titanio y cerámica, sistema de posicionamiento global (GPS) y la única ventana que puede bajarse es la del conductor y solamente 3 pulgadas para pagar un peaje de ser necesario o para hablar con el servicio secreto cuando caminan al lado de la limusina presidencial.
Desde el asesinato del presidente John F. Kennedy los otros autos oficiales tienen más seguridad y son blindados. Ya no se permite a ningún presidente utilizar autos descapotables. Tampoco se le permite al presidente conducir ningún auto hasta 6 meses después de la culminación de su mandato. Una vez la próxima limusina presidencial entra en función la anterior es desmantelada por el Servicio Secreto para que no se conozcan detalles ni posibles puntos débiles de la misma. 
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