Cuando pensamos en un “muscle car”, nos viene a la mente los Ford Mustang, Dodge Challenger, Chevrolet Camaro, y Pontiac GTO de los años ’60s.
Aunque los primeros 3 han regresado al mercado con un estilo moderno de sus modelos antepasados pero con mucha más potencia y tecnología, hay quienes quieren estar por encima de la norma. Algunos optan por adquirir un clásico y modificarlo con todos los estándares del momento y gastan miles de dólares para lograrlo. Otros quieren evitar los contratiempos que trae el modificar un auto de más de 40 años y prefieren comprarlo nuevo.
De los 3 modernos “muscle car” americanos, probablemente el Dodge Challenger es el más que se asemeja a su diseño original (específicamente al del 1971), pero ninguno captura la esencia tan clásica de la época como el Equus Bass 770. ¿No lo has escuchado? Este clásico moderno inspira sus formas en esos clásicos de los 60 y 70 pareciendo más un “restomod” (clásico restaurado moderno) de Mustang fastback del 67 o 68 que un auto moderno con estilo “retro”.
Y la pregunta que muchos se deben estar haciendo… ¿cuánto cuesta? Pues aquí entendemos el porqué de su excéntrica clientela. La versión más básica y monocromática del Equus Bass 770 comienza en los $534,000 (sin impuestos y entrega) y solamente se compra por su página web http://www.equus-automotive.com/. Todos los Equus Bass 770 son idénticos en cuanto a estructura y potencia. El precio sube cuando se personaliza al gusto del cliente. Por ejemplo, pintar los “calipers” de los frenos $3,000. Modificar los interiores, entre $13,000 a $25,000, “bumpers” con textura en cromo, bronce o aluminio anodizado $11,000.
El número 770 viene por las medidas del motor (8 x 770 cm3) que es un V8 LS9 de 6.2 Litros Supercharged fabricado por GM basado en el LS3, que se produjo para el Corvette ZR1 de 2009-2013 y que ahora GM solamente lo produce para el Equus. Tiene 640 caballos de fuerza, 605 libras de torque, desarrolla de 0-60MPh en 3.4 segundos y alcanza una velocidad máxima de 200MPh.
Algunas cosas modernas que puedes encontrar en este “clásico” muscle car son GPS, radio con CD/DVD y conector de USB, monitor de presión de los neumáticos, cruise-control… y todo esto construido sobre un chassis de aluminio.
Por ser una marca que no es una automotriz de producción en masa, la mayoría de las personas adineradas pueden considerarlo un gasto excesivo para un auto que no sabremos si en un futuro será una inversión y costará millones de dólares o un mero capricho que probablemente nunca se convierta en clásico. Como son muy pocos los que se lanzan a esta aventura unos pensarán que por esa razón el auto aumentará de valor. Otros preferirán invertir ese dinero en un Ferrari, Rolls-Roycen, Aston Martin o una pequeña colección de clásicos.
Independientemente si lo encontramos como una locura o una maravilla, si vemos pasar un Equus Bass 770 por nuestro lado, casi seguro voltearemos la cabeza para mirarlo. ![]()
Fotos propiedad de Equus Automotive.
